Lo que hay que hacer

El MAPMA saliente se ha despedido con un Estudio  sobre el Mar Menor (Análisis de soluciones para el objetivo del vertido cero al Mar Menor proveniente del Campo de Cartagena) que al Gobierno Regional no le ha sentado nada bien. En la última entrada de este blog comentaba las declaraciones de FLM en las que manifestaba, alto y claro, «sabemos lo que tenemos que hacer», aunque llamaba la atención que no expusiera ni siquiera un esbozo. La portavoz del Gobierno ha manifestado que el informe técnico y científico es duro y que presentará numerosas alegaciones. Parece que «lo que hay que hacer» no es del gusto del Gobierno Regional.  

Las asociaciones de agricultores del Campo de Cartagena se han sumado a las declaraciones del Gobierno Regional con un discurso victimista que reclama que se deje de «crimininalizar al sector», como si la constatación de la «eutrofización» del Mar Menor, que ha generado una «crisis ecológica grave» con «elevados niveles de nitratos» y la «alteración drástica de las comunidades biológicas asociadas» (los entrecomillados son copia literal del estudio) fuesen consecuencias ajenas a la actividad agrícola de la zona.

Las soluciones que propone el estudio se dirigen fundamentalmente a modificaciones cualitativas, e incluso cuantitativas, en la agricultura del Campo de Cartagena, y también en la ganadería. Se trata de «resolver la llegada de contaminantes al Mar Menor procedentes del Campo de Cartagena a través de las aguas superficiales y subterráneas». Las actuaciones se centran en minimizar este problema, y se plantea «mejorar la fertilización y adaptar el modelo productivo para reducir su uso»; «adecuar las instalaciones de almacenamiento de las deyecciones ganaderas»; «establecer un régimen de explotación de la masa de agua subterránea y reducir los retornos de agua de riego»; «controlar los procesos erosivos y mejorar el sistema de saneamiento». A mi entender, solamente la mejora del sistema de saneamiento es ajena al sector agrícola y ganadero.

Los escenarios que plantea el Estudio, se han denominado: «cero o tendencial»; «objetivo»y un intermedio, denominado «adaptativo». El «tendecial», el que se viene practicando (si obviamos los aumentos de superficie cultivable), tiene un pronóstico muy oscuro: «empeoramiento drástico a futuro». El escenario «objetivo» plantea distintas actuaciones que inciden, fundamentalmente, en cumplir la legislación vigente («lo que supone un avance en la rectificación de los hábitos del pasado», aunque parezca mentira); mejorar la fertilización, cambio del modelo productivo y sustrato confinado en aproximadamente la tercera parte de la superficie cultivada. Lo que debe entenderse, a mi parecer, que hay que disponer un sustrato impermeable que permita recoger las escorrentías de los riegos y descontaminarlos (sin duda la cláusula más restrictiva). El escenario «adaptativo» no deja de ser sino un camino de un escenario a otro.

Con todo ello, los resultados del Estudio no son la peores noticias que ha recibido el sector agrícola del Campo de Cartagena, la televisión pública alemana ARD ha emitido un reportaje en el que culpa a la industria agroalimentaria de contaminar la laguna y cuestiona el consumo de los productos de la Región. Y esto si que puede ser un gravísimo problema. Los consumidores de los países más desarrollados (los que comprar nuestros productos agrícolas) son muy sensibles a los problemas del medio ambiente y, si las organizaciones medioambientalistas inician una campaña en profundidad, el boicot puede tener éxito, lo que sería nefasto para la economía murciana

Con las conclusiones de  este Estudio, la crisis ecológica grave del Mar Menor y la espada de Damocles que se cierne sobre la aceptación de nuestros productos agrícolas por parte de los consumidores europeos, parece que ha llegado el momento de hacer «LO QUE HAY QUE HACER», pues de otra forma corremos el riesgo de perder del todo nuestro Mar Menor (y su contribución al PIB de la Región) además del mercado europeo de los productos agrícolas de la zona.

PD. No estaría de más que se hiciese un estudio económico que reflejase el peso del sector servicios de la zona (que pudiera verse afectada por un empeoramiento drástico del Mar Menor) y el del sector agropecuario del Campo de Cartagena. Si ya existe, y alguien me puede proporcionar el enlace, agradecería que me lo hiciese llegar.